En una maleta llevaba unos 50 casetes. Las cintas estaban marcadas con esmalte para saber dónde empezaba y acababa un tema. Así sonaban canciones como “Sobredosis de TV” de Soda Stereo en los cumpleaños a los que lo invitaban para poner música. Tenía 14 años y también cantaba en la orquesta de La Fuga Latina.

Pero Sandro Raúl Calderón Castillo, hoy con 45 años, primero fue actor. A los 6 años debutó en una tarima, dos años después entró a su primer taller. Se aprendía los libretos de memoria. Sus hermanos mayores, comprometidos con la cultura, fueron su inspiración, en su barrio de la avenida Arenales, Ciudad de Dios, en San Juan de Miraflores. Le atraía ver cómo los actores se transformaban y provocaban una reacción en el público.

Así, Sandro construyó los cimientos del presente: su pasión por la actuación y la música, que lo convirtieron en profesor de cine en el prestigioso colegio Markham; participó en 20 filmes, como La hora final y Django 2, próxima a estrenarse, en unas 15 obras de teatro y en la televisión en series como De vuelta al barrio. Y cada noche se transforma en Salsandro, su alter ego que monta discos de salsa, además de ser manager de la orquesta Ray Callao.

ESCENAS DE TERROR
Los primeros pasos en la actuación los vivió en medio del terrorismo que azotó al Perú el siglo pasado. Estudió en el colegio Fe y Alegría N° 3 y dos de sus profesores, de filosofía y arte, eran miembros de Sendero Luminoso.

Recuerda que él se enfrentó a uno de esos profesores y le increpó que tenía una idea equivocada. La respuesta que recibió fue: “Tú eres un accidente en este lugar, no deberías estar aquí”. Acabó el colegio y formó su primer grupo de teatro Puertas y Ventanas, cuando tenía 18 años. Y otra vez se rebeló a SL. Un día se acercaron para convencerlo de que trabaje, desde al arte, en la causa senderista. Se volvió a negar. De esa forma, forjaba su carácter como gestor cultural.

SALSA CON CLASE
Ver a Héctor Lavoe en la Feria del Hogar, en el año 86, le cambió la vida. Aún recuerda con emoción cada escena de ese episodio. Luego vendría su sección Salsa All Star en un programa de radio y, desde hace seis años, comenzó a poner música como Salsandro. Él prefiere que no le digan DJ. Su valor es el conocimiento de la salsa y el contacto con la gente mientras pone la música: reparte maracas, claves, el bongó y güiros.

Si bien recientemente renunció a ser profesor en el Markham, luego de 17 años, ese carácter multifacético se sigue formando. El actor está aprendiendo flauta traversa, la danza es una cuenta pendiente y alista una empresa de espectáculos. Tiene cortos escritos, quiere dirigir cine y le gustaría volver a tocar en una orquesta. Mientras sueña, planea, se proyecta, sigue interpretando su mejor papel: el de Sandro Calderón.

TENGA EN CUENTA:
-“He sido gestor cultural en las peores condiciones que hubo. No me daba tanta plata, pero sí mucha felicidad”, subraya Calderón.

-Debutó profesionalmente en 'Pantaleón y Las Visitadoras'. Estará en 'Locos de amor 2' y Caiga quien caiga.