La obra se basa en el guion del argentino Rafael Nofal. (Difusión)
La obra se basa en el guion del argentino Rafael Nofal. (Difusión)

En 2017, la informó que el Perú ocupaba un preocupante tercer lugar en la región con el mayor número de casos de trata de personas. Un delito que afecta, principalmente, a mujeres y que interrumpe por siempre sus vidas al ser captadas para ser convertidas en esclavas sexuales. Esta problemática es desarrollada en El tiempo de las mandarinas, una obra llevada al teatro por los alumnos de último año y egresados de la Escuela Nacional Superior de Arte Dramático (Ensad).

SOÑAR PARA SOBREVIVIR

La obra, escrita por el argentino Rafael Nofal en 2014, presenta 15 historias basadas en hechos registrados en Argentina. Las tramas no son expuestas de forma cronológica, pero sí guardan entre varias de ellas un hilo conductor: las mandarinas, figura que hace alusión a cómo se manipula tanto la fruta como a la mujer.

En esta puesta en escena, elegida por el director Carlos Acosta y que pretende “visibilizar y sensibilizar” sobre la trata de mujeres, sus protagonistas se enfrentan de distintas formas a la adversidad: chicas que no renuncian a volver a vivir libre y espontáneamente, y quienes se rinden.

“Presentamos historias de cómo estas mujeres son engañadas y retenidas a la fuerza. Y también de qué forma intentan desde esta precariedad subsistir y no ser destruidas por completo”, explica el director.

Pese a las tragedias que viven estas mujeres, Acosta considera que la puesta en escena es como un grito de esperanza. En ese sentido, la actriz Diana Tolentino nos comenta que su personaje sueña una realidad alterna para así escapar del drama que atraviesa.

“Interpreto a una mujer que sufrió la violencia extrema y es apoyada por otras chicas que se encuentran en la trata de blancas. Con una de ellas, desarrolla un vínculo más fuerte y juegan a ser niñas por un momento para escapar de la dura realidad que ambas viven”, nos comenta Tolentino.

Para sus personificaciones, las actrices se basaron en testimonios de mujeres víctimas de trata en países latinoamericanos, entre ellos México y Perú. (Difusión)
Para sus personificaciones, las actrices se basaron en testimonios de mujeres víctimas de trata en países latinoamericanos, entre ellos México y Perú. (Difusión)

HABLAN POR ELLAS
Un momento que la actriz destaca es cuando el elenco se une para formar un coro y ser una sola voz por las chicas que ya no pueden ser escuchadas. “Hablamos por las mujeres que sufren y por las que luchan por escapar. Por aquellas que nunca más podrán hablar. Y también por las que son víctimas pero no lo saben”, subraya Diana.

El tiempo de las mandarinas es de aquellas obras teatrales que dan un paso más allá del entretenimiento, que apuestan por la forma y el fondo. Nos toca no ser indiferentes.

DATOS
- El tiempo de las mandarinas va hasta el 26 de abril. Se presenta de lunes a jueves, a las 8 p.m., en la Ensad (Av. Petit Thouars 195, Cercado de Lima). S/20.