Maju Mantilla, fue Miss Mundo en 2004 y ahora es conductora de TV. (Fotos: Renzo Salazar).
Maju Mantilla, fue Miss Mundo en 2004 y ahora es conductora de TV. (Fotos: Renzo Salazar).

En las vacaciones se olvida de que existe el maquillaje, no quiere salir de casa, usa ropa cómoda, ligera, short, polo. “Toda fresca”, se describe. Pero se acabaron las vacaciones para . Esta semana empezó una nueva temporada de En boca de todos, programa de América TV donde ella es conductora.

Comenzó a trabajar a los 17 años. Era anfitriona en su natal Trujillo. Pero ella no soñaba con estar frente a las cámaras de TV, ni ganar certámenes de belleza. Quería dedicarse al atletismo y competir en un estadio con miles de personas gritando. “Cómo me gustaría estar bien de la rodilla para poder bailar y correr”, dice con cierta nostalgia por la lesión que frustró su carrera deportiva.

Llego a su casa y están maquillando a Maju. Luce casi lista para ir al canal. Detrás de la belleza natural que posee, que la llevó a ganar el Miss Mundo en 2004, noto aún a la chica tímida, que se desplaza con un poco de dificultad porque acaba de salir de su tercera operación a la rodilla. Pero el brillo de sus ojos y su espontánea sonrisa todo lo pueden.

Hace siete años entraste al mundo de la TV. ¿Dudaste?
Al principio sí, porque pensaba que la gente iba a estar pendiente de lo que yo diga. Siempre he sido de perfil bajo. Mi esposo me pidió compromiso, me iba a casar e iba a estar en Lima todo el tiempo; entonces dije: “Voy a probar un año para ver qué tal me va”.

Cuando se critica a la TV y se la etiqueta como basura, ¿qué sensación te deja?
Me disgusta, porque hay público para todos. Sí hubo un momento en que la TV hurgaba en la vida de los demás, había mucha cizaña.

Bueno, Magaly Medina ha vuelto a la pantalla.
Habrá un público al que le fascinará ver gente llorar, que le va mal.

¿Y eso no es TV basura?
No sé si llamarla así. Pero esos temas son muy delicados para tocarlos de esa manera. Si uno quiere hacer nueva televisión, hay que tratar de mostrarle al público que puedes preguntar al personaje sobre su vida, pero de una manera correcta. En mi caso, somos un magazine de entretenimiento, tenemos secuencias con artistas que hablan de su vida, pero lo hacemos de tal forma que pueda ser del gusto de él y del público.

¿Y procuras que los contenidos y forma de abordar los temas sean a tu manera?
Hubo una época en que no me gustaba lo que estaba pasando. Y yo lo decía todo el tiempo. Al final de un programa terminaba arrepentida de por qué hicimos tal o cual cosa. Gracias a Dios, el programa dio un giro rotundo. Y hoy me gusta mucho más.

Has hecho triatlón. ¿La adolescente Maju Mantilla soñaba con este momento?
Soñaba con estar en un estadio con miles de personas gritando y yo corriendo.

¿Hubieses preferido esa forma de éxito?
Si no hubiese tenido un problema en la rodilla, no habría sido Miss Mundo ni Miss Perú, ni conductora de televisión. Amo el deporte, ha sido mi sueño. Para mí el deporte era más importante que el colegio. Pasaba tres horas diarias en el estadio. Pero a raíz de la caída que tuve en 2002, jugando básquet, me lesioné y apareció la opción de empezar a trabajar, competir y ahora estoy acá.

Maju Mantilla
Maju Mantilla

¿Es cierta la historia de que nadie confiaba en que Maju obtenga el Miss Mundo?
Mi papá tenía un poco de temor de que participe porque sus hermanas lo han hecho. Mi tía Maju fue Miss Perú en el 69 y otras tías, hermanas de él, han sido Miss La Libertad. No pasa en mi familia, pero la gente es muy prejuiciosa. He sido tímida y pensaban que por eso no iba a ganar la competencia. Eso también me pasó en TV.

¿Eres tímida como una forma de protección frente al error?
He sido tímida desde chica e insegura. Cuando entrenaba, si me salía algo mal, me ponía a llorar.

¿Y qué te ha dado seguridad?
La experiencia, la gente de la que me he rodeado. Viajar, unirme con gente optimista, positiva.

¿Qué te ha enseñado la TV?
A enmendar errores, a reírme de mí misma y mis imperfecciones.

Las reinas de belleza son como símbolos de la perfección.
No es así, y menos yo. Era insegura, ahora me pongo impaciente, ansiosa, en ciertas cosas me suelo desanimar rápido, a veces me dicen cosas bonitas y suelo no creerlas.

En el último Miss Universo se desató toda una polémica por la inclusión de Ángela Ponce, una candidata española transgénero. ¿Qué opinas?
El Miss Universo es muy abierto. Me parece que tiene todo el derecho. Ella también tiene sueños y objetivos. Pero también hay que respetar a las chicas que creen que eso no es correcto.

¿Crees que es importante que los concursos de belleza den mensajes de diversidad y tolerancia?
Claro que sí. Debemos ser tolerantes en todo el sentido de la palabra. En el Perú, por ejemplo, las mujeres no tienen el mismo derecho de participar en carreras o trabajos como los hombres.

Esa misma apertura debe haber para la población gay.
Así es. No puedes impedir a alguien que realice lo que más le gusta, y que puede hacerlo porque tiene el talento, solo porque tiene otros gustos. Ellos pueden vivir, reír, amar, divertirse, disfrutar, ganar y lograr. Pueden ser tan exitosos como todos. Me parece bien que exijan sus derechos, pero con respeto.

¿Qué es la belleza?
Algo muy relativo. Para mí es ver a mi familia sana y feliz.

¿Dónde está la belleza?
En el modo de ser, en cómo nos hablamos, tratamos y respetamos. En la sensibilidad.

¿Y la fealdad dónde está?
En lo horrendo que puedes hacer por alguien, las violaciones, la violencia, la delincuencia, la corrupción. Todo eso es horrible porque nos daña a nosotros y hace que dañemos a la sociedad.

Maju Mantilla.
Maju Mantilla.

AUTOFICHA:
“Nací en Trujillo, el 10 de julio de 1984. Estudié en el colegio Nuestra Señora del Perpetuo Socorro. Viví en Trujillo hasta los 19 años de edad y me mudé a Lima para participar en el Miss Perú. Tengo una hermana mayor que es mi mejor amiga y ella es ingeniera agrónoma; toda la vida ha sido chancona”.

“Tengo cuatro medios hermanos. Tengo dos hijos, el mayor se llama Gustavo y hoy cumple seis años, y Luna María cumple tres años el 23 de febrero. Mi esposo se llama Gustavo, con quien vamos a cumplir siete años de casados. Creo que no tendría un tercer hijo”.

“En TV estuve en Ven, baila, quinceañera y acabo de hacer una novela que se llama Te volveré a encontrar, que sale a mediados de año quizá, también por América TV. Cine no he hecho, llámenme (risas). Estoy estudiando actuación con Miguel Iza. Y tengo un negocio de hospedaje en Zorritos, en el norte”.