Macarena Guerra-García (Foto: Katia Sanchez).
Macarena Guerra-García (Foto: Katia Sanchez).

Es la peruana que brilla en Europa. Dejó Lima para estudiar Artes Plásticas en Francia; a la vez, es modelo y acaba de protagonizar un comercial para en Alemania.

Estudia en la Universidad de París 8, etiquetada como de izquierda y son días de manifestaciones contra la reforma de jubilación. Protestas que llevan unos dos meses y a las que, confiesa, ha asistido alguna vez.

Modela desde los 12 años. Es su trabajo, es un medio para, entre otras cosas, dedicarse al arte y vivir en Europa. Macarena Guerra-García contesta esta videollamada desde una de las capitales de la moda y del arte, a 40 minutos en Metro de todo, del Centro de París.

¿Comenzamos? “Ya, sí...”, me dice con voz baja y tenue, bajo una aparente timidez que esconde detrás de su sonrisa.

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-Siendo estudiante de Artes Plásticas, deduzco que puedes ser una modelo con una visión particular, ¿o no?

(Piensa la respuesta)... Sí. Creo que ser modelo me ha dado herramientas... Quiero especializarme en Fotografía y sé cómo es sentirse del otro lado. Cuando he fotografiado a personas o modelos, siento que puedo tener esa sensibilidad, tino o empatía para lidiar con la relación fotógrafo-fotografiado. Y eso me gusta.

-Por la formación que tienes, ¿en algún momento te cuestionas ser modelo?

Sí, me polemiza...

Macarena Guerra-García (Foto: Good Morning Keith (GMK)).
Macarena Guerra-García (Foto: Good Morning Keith (GMK)).

-O tal vez propones una nueva forma de entender el modelaje.

Son varios puntos. A ver... El modelaje es un trabajo; por otro lado, soy muy consciente de qué imagen estoy dando a niñas en plan “este es el modelo a seguir”; sé que eso puede influir mucho. Por ejemplo, en los 2000 estaba súper de moda las modelos reflaquísimas, casi anoréxicas, ¿imagínate cuánta gente miraba esas fotos y pensaba que ese era el canon de belleza? En mi caso, soy así porque así nací, en mi familia somos flacuchos. Sí me conflictúa esa parte del modelaje y estoy súper a favor de que ahora, cada vez más, se visibilicen distintos tipos de cuerpos, como es el mundo de verdad.

-¿Cómo llegas al comercial de Mercedes-Benz?

Esa campaña fue en Alemania. Mi suegra vive en Stuttgart y solemos ir a visitarla, y pensé que estaría bueno contactar a alguna agencia de allá por si salía algo. Y contacté a una agencia, fue hace como tres años. Y recién el año pasado, me dijeron “hola...”. Primero hice una campaña en Francia y luego me llamaron para otra en Alemania; y hasta ahora, lo de Mercedes-Benz es lo más grande que he hecho en Europa. Acá normalmente trabajo más con diseñadores que tienen marcas sostenibles, responsables.

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-A eso me refería con tener una visión del modelaje.

Sí, prefiero, me gusta más, lo disfruto, me encanta conocer a la gente que está en esos círculos. En el 2019 vine a tantear si era viable trabajar acá. Y en marzo del 2020 volví y vino el fin del mundo para todos: la pandemia lo cambió todo. Entonces, mi experiencia como modelo no ha sido lineal.

-Pero después de la experiencia con Mercedes-Benz pueden llegar cosas más interesantes, ¿no?

Sí, sí... Estuvo buenísimo. Se ha retomado el ritmo, poco a poco; claro, no como en Lima, porque allá trabajaba todos los días.

-¿Y hacer un comercial de ese tipo es como llegar a una estancia muy elevada, muy fastuosa?

Es un cliente grande, pero en realidad es ‘tranqui’. Éramos un chico alemán y yo, y se nota que toman muy en cuenta la vibra del equipo, eso me gustó. Fue un comercial para todas las redes sociales de Mercedes-Benz.

Macarena Guerra-García (Foto: Judith Benita).
Macarena Guerra-García (Foto: Judith Benita).

-Vienes del colegio Reyes Rojos. ¿Eso influye en cómo entiendes tu trabajo?

De todas maneras. La he pasado muy bien, en el colegio he sido muy feliz. Mucho de lo que soy es por mi familia, obviamente, y también por el colegio. Nos han inculcado mucho la cultura: el arte, el cine, la danza, pero también la empatía. Estudiar, por ejemplo, con personas que pueden tener autismo te forma de una manera diferente, y siento que eso es clave en mi formación.

-¿Y por qué es importante formarse en las artes?

Está el hecho de que trabajes en grupo, en equipo y aprendas a comunicarte de esa manera. Son herramientas que te servirán para toda la vida.

-¿Te sirve para hacer la diferencia en el modelaje?

Eso espero (sonríe)... Por ejemplo, en Perú algo que siempre me ha parecido rarísimo es cómo a veces hay catering para los personajes principales de un comercial y hay otro catering para los extras. Acá no es así, todos comemos con todos, es horizontal.

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-¿Te sientes modelo?

Es una pregunta difícil. Si bien he trabajado en eso toda mi vida y es parte de mí, quisiera que no sea lo primero... Si alguien pregunta por mí, me gustaría más que digan que soy estudiante, o que tomo fotos, o que soy una gran hermana. Y no quiero decir que ser modelo es algo malo, para nada.

-Pero está bien polemizar nuestro trabajo.

Siempre está bueno cuestionarse. Siempre. Si no, qué aburrido.

-Me cuentas que tu abuelo era un hombre de ciencias. ¿Qué te decía de tu trabajo?

Siempre nos ha fomentado la lectura. Cada vez que iba a verlo era: “¿Qué estás leyendo?” (risas). Y obviamente siempre teníamos que estar leyendo algo.

-La última vez que lo viste y él te preguntó eso, ¿qué leías?

Sapiens (de Yuval Noah Harari).

-¿Y qué te dijo?

“Ya conversaremos”.

AUTOFICHA:

- “Soy Macarena Guerra-García Ortiz. Nací en Lima, pero mi familia paterna es de Cajamarca, siempre estamos muy unidos a esas tierras. Mi abuelo falleció en 2020, fue durísimo, yo estaba acá (Francia). Hace poco fue su cumpleaños: lo celebramos y lo pensamos todos los días”.

- “Somos seis hermanos, somos una familia extensa. El menor era el favorito de mi abuelo, quien fue médico endocrinólogo, una eminencia de la medicina, se llamó Roger Guerra-García. Estudio en Francia Artes Plásticas y quiero especializarme en Fotografía”.

- “Me gustaría hacer fotografía documental, desde la antropología visual. Con mi novio también tengo una radio web que se llama Radio Soledad, que la empezamos en pandemia; lo hicimos un poco jugando porque tenemos una colección de vinilos; y esperamos sacar nuevos episodios”.

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