Juanchi Baleirón: ¿Qué lugar ocupa el Perú en el renacimiento de Los Pericos? [ENTREVISTA]

Está en Buenos Aires, en su casa. Hace un día llegó de México, de una gira. Anoche tuvo un concierto en Buenos Aires y en un rato parte a Mendoza, para otra presentación con su banda Los Pericos. Acaban de lanzar “La distancia”, una canción de Roberto Carlos, y este sábado vuelven a Lima, para presentarse en el Corona Sunsets Sessions, que se realizará en el Lima Polo Club de Lurín, compartiendo escenario con bandas como Inner Circle, Yotuel (exOrishas) y los nacionales Miki González, Laguna Pai y We The Lion. “En nuestra cuna de renacimiento tenemos una banderita peruana cerca del corazón”, me dice.

Ana, la manager y madre de sus hijos, estaba en la oficina. Entró una llamada. Era de Perú, de un reality show. Una invitación para Los Pericos. Ella explicó que estaban en tránsito de cambiar de vocalista tras la salida de Bahiano. “No importa, los queremos”, respondieron. Bajó y lo comunicó: “Chicos, en menos de un mes se van a Perú”. “¿Cómo?”, “No nos consultaste”, se escuchó en tono de protesta en momentos en que estaban viendo cómo reestructurar la banda después de la salida de la figura que había ayudado a consolidar al grupo como uno de los más importantes de Latinoamérica. Pero era para hacer play back y ellos querían tocar en vivo. Conversaron con la banda peruana de reggae Semillas, amigos del grupo, para montar un show pequeño. Hasta hoy Juanchi recuerdas las cinco canciones que tocó aquel día: “Sin cadenas”, “Pupilas lejanas”, “Complicado y aturdido”, “Runaway” y “Waitin”, parte de los hits radiales que cosecharon. Así se concretó el debut del renacimiento de Los Pericos con Juanchi Baleirón en la voz, quien tocaba la guitarra. Hace 18 años. “Faltaba el empujón, uno se pone inseguro, un miedo que te empuja a huir hacia adelante”, dice el músico que empezó siendo metalero en su adolescencia.

Son 35 años sobre los escenarios. Se estima unos 19 discos. Se viene una gira por Estados Unidos, España, Italia, Argentina y otra vez México. “Estamos contentos de volver a vivir”, me dice.

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-¿Por qué eligen “La distancia” y a Roberto Carlos?

Es el por qué para todo el disco que se viene en mes y medio, un álbum que se llama Viva Pericos, un disco de covers. Tiene un poco de rock y pop, clásicos de todos los tiempos, también nos metimos con Julio Iglesias, Jorge Drexler, Soda Stereo, Los Rodríguez, Robi Draco Rosa, en Cuba con “Lágrimas negras” y cruzamos a México, donde nos abrazamos a la música regional. Pusimos sal y pimienta, contraste y brillo, y sobre eso montamos las canciones. Es ecléctico, con un sonido muy nuestro.

-Tal vez en Perú aún se les vincula bastante al reggae, pero hoy, más de tres décadas después de haber empezado esta aventura, ¿qué es Pericos?

Arrancamos siendo una banda de reggae, donde intentábamos hacer lo más parecido posible a lo que hacían nuestros ídolos y en ese proceso le pusimos una personalidad que quizás para nosotros en ese momento era un error: alejarnos del género de raíz era como hacerlo mal, pero este ‘hacerlo mal’ terminó siendo personalidad, estilo. El reggae es un vehículo, no un fin. Fuimos pioneros, en cuanto que fuimos la primera banda que explotó masivamente siendo de reggae en el 87, 88. No somos puristas del reggae, nunca quisimos serlo. Pericos es una banda con 35 años ininterrumpidos. Hemos atravesado por diferentes momentos de cambios. Nuestro saxofonista Horacio falleció y fue lo más difícil de nuestra carrera.

-¿Cómo fue ocupar el lugar de Bahiano, cuya imagen era muy fuerte?

Recontra fuerte. Hoy lo hablamos después de 18 años, de giras, de nominaciones, de premios, Europa, América recorrida, pero somos conscientes de que Bahiano fue muy fuerte. Fue una determinación en contra del sentido común. Pero creo que a la gente le cayó bien que Pericos se reinvente.

-¿Qué hizo que persistieran?

La determinación de seguir tocando, que lo que habíamos logrado fue colectivamente, de una banda. Como diciendo: “Nadie nos va arrebatar esto. Queremos seguir”.

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-Muchas bandas del corte de ustedes, reggae y ska, han incursionado en otros géneros, como la cumbia. ¿Pericos tuvo un guion donde no estaban contempladas las modas?

En 35 años hemos visto muchas tendencias que han ido y vuelto. No hay que forzar un cambio.

-Por los menos en Perú puede haber ocurrido que muchas personas se han quedado con hits como “Párate y mira”, “Home sweet home” o “Me late”, y ahora se preguntan sobre qué nuevos hits han alcanzado. ¿Eso les preocupa, cómo lo asimilan?

Quizás antes por ahí tenías más a flor de piel tu inspiración ligada a un hit, hoy tu inspiración está ligada a que hagas una canción que te guste y sea coherente. No es por compararme (subrayo y pongo en negritas), Rolling Stones si no tocaran temas de hace 50 años, no los irían a ver nadie. Ahora, recientemente en México, Argentina, Chile y Uruguay la canción “Anónimos” fue la más escuchada de Pericos y es reciente, que nos llevó a estar nominados a los Grammy, o cuando ganamos dos premios Gardel, que es significativo: nunca antes estuvimos nominados a ningún premio. La carrera de Pericos es rica y tiene de todo.

-¿Por qué elegiste la música?

Cuando Pericos trasciende, dejo todo por la música.

-¿Qué dejaste?

La facultad. Pero cuando menos me lo esperaba, la banda de amigos se transformó en la banda que me cambió la vida para siempre.

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-En 18 años al frente de Pericos, ¿no pensaste ser solista?

Y no; en todo caso, haría cosas diferentes.

-Imagino que un cantante, sobre todo, tiene que saber controlar al ego.

Yo canto porque alguien se fue. El ego lo manejás, y yo lo veía viendo desde mi lugar de guitarrista, viendo cómo el cantante está expuesto a que el ego lo altere, entonces yo ya vine más o menos vacunado. Igualmente, tenés que ejercer tu rol de frontman. Es lo que me tocó y elegí.

AUTOFICHA

- “Soy Juan Alfredo Guillermo Baleirón. Nací en Santa Fe, provincia de Santa Fe y después me fui a Buenos Aires. Mi papá era militar y le tocó pasar a otra ciudad. Mi papá fue militar profesional, pero en su actitud fue lo menos militar posible, cariñoso, expresivo, artista frustrado”.

- “Mi mamá tiene 90 años, es profesora de literatura. Soy bueno twiteando pero no escribiendo (ríe). Acabé el colegio y estudié Derecho, no sabía bien qué hacer, de ahí pasé a Psicología. Desde los 14 años, en el corazón sigo siendo metalero, me tocó una época dorada”.

- “Como productor, he producido a bandas icónicas como Attaque 77, en discos como El cielo puede esperar, Ángeles caídos; Dos Minutos; Mal Momento; No te va gustar; un montón de bandas. Nunca me dijeron si traicioné al metal por el reggae, por ahí un “¿qué onda?”, pero fui feliz en mi adolescencia”.

DATOS:

-El Corona Sunsets Sessions tendrá actividades con material reciclado, como conocer más sobre el uso del plástico y entender el proceso del reciclaje para darle nuevos usos. También podrán participar del taller de brazaletes en el que podrán elaborar sus propias pulseras con hilo de plástico reciclado.

-Habrá un workshop para aprender a hacer tus propias bandanas con la técnica del Tie Dye, utilizando el tinte de elementos naturales como la papa, camote y otros vegetales.

-Habrá arte corporal y el Natural Booth, un espacio ambientado con elementos pet.

-Lima Polo Club Lurín está en el kilómetro 26 al sur de Lima.

-Las entradas están disponibles en Joinnus.

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