José Carlos Yrigoyen: Gracias mundiales

Esta columna es para mí muy especial. La escribo en la mañana del jueves 16, muy pocas horas después de que Perú, luego de una larga caminata en el desierto en la que muchas veces nos sentimos desfallecer, clasificó al Mundial de Rusia. Sé que este es un espacio dedicado a la literatura. Por eso ofrezco disculpas a mis lectores por la licencia que me arrogo. Confío en que sabrán perdonármela y que muchos empatizarán conmigo ante esta humana debilidad.

Como vamos a la Gran Fiesta, supongo que muchos de ustedes querrán informarse sobre los avatares y diferentes ediciones de la Copa del Mundo, tanto de aquellas a las que asistimos como las numerosas que nos fueron vedadas. Por eso debo recomendar el libro que estimo fundamental sobre este asunto: Historia de los mundiales de fútbol de Brian Glanville, quien es, sin debate posible, uno de los mejores escritores y periodistas deportivos del planeta. Glanville fue corresponsal en el Sunday Times durante tres décadas, asistente privilegiado a doce mundiales, dueño de una prosa envidiable y de un humor y amenidad que no se detienen nunca a lo largo de las cuatrocientas páginas de este libro. Ahora que se ha reeditado una versión revisada y actualizada de este trabajo monumental, vale la pena rescatarlo y difundirlo.

En medio de decenas de volúmenes utilitarios que relatan las fases finales de la Copa sin mayor gracia ni profundidad, el libro de Glanville destaca sin segundo puesto aparente. Casi todos esos libros están elaborados por asépticos redactores empeñosos; Glanville, en cambio, celebra, se enfada, impugna, se maravilla en cada partido narrado, con el mérito de que todos los retrata con un aliento épico que nunca cae en el lugar común, en la expresión intercambiable ni en la metáfora forzada. Esboza perfiles de jugadores que describen sus grandezas, sus derrotas y sus circunstancias personales en breves párrafos donde se expone su rara maestría para entender el juego y los hombres que le dan vida. Sus mejores crónicas son, sin duda, las que realiza sobre los mundiales de los años setenta y ochenta, que deberían ser consideradas las versiones definitivas de estos eventos por su objetividad, detalle y análisis general. Para cualquiera que ame el fútbol, este libro es de obligatoria presencia en su mesa de noche. Más aún en estos días de gloria.

Esta columna también es especial porque será la última que publique en Perú21. Quiero agradecer a mis amigos del diario por la confianza que pusieron en mí y que espero haber correspondido con decoro y, si se pudo alguna vez, con altura. He tenido la fortuna de comentar para ustedes muchos libros peruanos y extranjeros a lo largo de más de dos años. No me queda más que agradecer su paciencia y en algunos casos su simpatía. Sé que muchas veces ustedes y yo no hemos coincidido en las valoraciones que he firmado sobre ciertas novelas, poemarios y ensayos, lo cual es lo mejor que puede sucederle a un autor y a un libro: que genere disenso y polémica. Porque, como decía Borges, entenderse es una miseria.

Esto, en todo caso, no es el final. No lo es. Pero por ahora solo me queda darles una vez más las gracias y seguir disfrutando de este momento mágico que esperábamos desde tanto tiempo atrás.

Arriba los corazones.

Valoración

Brian Glanville
- Historia de los mundiales de fútbol. T&B editores. 2017, 417 pp.
- Relación con el autor: ninguna.
- Puntuación: 5 estrellas de 5 posibles.