Un dios en calzoncillos
Un dios en calzoncillos

Está muy bien leer a nuestros contemporáneos, pero leer a los clásicos recientes es mucho mejor. Y lo “clásico” cobra sentido ante un autor que nos presenta una realidad que conmueve pese a remitirnos a los Estados Unidos de la primera mitad del siglo XX. Su literatura nos estremece desde un ambiente sosegado que contrasta con nuestro vertiginoso día a día.

Leer a John Cheever (Massachusetts, 1912 - Nueva York, 1982), y particularmente sus relatos, ha sido como ingresar en un mundo apacible, donde habitan personajes que internamente pugnan por salir de allí. Esas casitas de campo de la clase media de los suburbios de Nueva York cobijan a hombres y mujeres hastiados de matrimonios pegados con babas, inmersos en las apariencias de una sociedad donde las fiestas y otros ritos marcan la pauta de este mundo de aspirantes a ricos o de ricos en decadencia. Los protagonistas de los cuentos de Cheever no son seres desquiciados, sino que más bien son conscientes de lo que ocurre y ese arranque de lucidez los lleva a cometer acciones desesperadas.

Casi contemporáneo a Raymond Carver y John Updike, Cheever es considerado un narrador faro de la literatura estadounidense, y maestro de los que vendrían después, entre ellos Richard Ford. Atormentado por su alcoholismo y su bisexualidad, fue renuente al exhibicionismo como escritor.

Muchos de los 61 cuentos incluidos en esta reedición de Random House los escribió encerrado en un sótano sin ventanas y en ropa interior. Todo un dios mundano, despiadado y benevolente a la vez con sus personajes. En sus historias están presentes casi siempre el alcohol, el dinero y las bajas pasiones.

Aunque el acercamiento al ‘universo Cheever’ es una experiencia personal, no puedo dejar de mencionar mis cuentos favoritos: “El marido rural”, “La monstruosa radio”, “El tren de las cinco cuarenta y ocho” y “Canción de amor no correspondido”. Aunque se le suele llamar el ‘Chéjov norteamericano’, esta comparación no le hace mucha justicia. Sus tragedias cotidianas tienen un sello propio, a veces sombrío y otras de un disparatado humor negro. Hay en estos cuentos unas revelaciones que nos punzan la mente y nos estallan en la cara. Leer a Cheever no nos deja indiferentes.

Cuentos
Autor:
John Cheever
Editorial:
Literatura Random House
Madrid, 2018. 878 pp.

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