Redacción PERÚ21

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Muchas mujeres han experimentado o experimentan dolores al momento de la llegada de su una vez al mes. Estos dolores pueden variar en su intensidad, desde los casi imperceptibles hasta los muy dolorosos. 

Estos dolores intensos pueden ser causado por alguna enfermedad ginecológica o alguna patología que tiene que ser atendida adecuadamente, de lo contrario, podría conllevar a afectar la fertilidad de la paciente.

El dolor menstrual, conocido en el mundo médico como dismenorrea, es un dolor asociado a la llegada de la regla y se presenta principalmente en sus primeros días. Este es comúnmente asociado a dos tipos de enfermedades: endometriosis y miomas.

"La causa más frecuente de este dolor es la endometriosis. Sin embargo, no todos los dolores de regla o pélvicos se asocian a endometriosis. Hay otras patologías que se pueden asociar, como los miomas o cualquier otra enfermedad o patología del aparato genital", refiere la doctora Alicia Hernández, coordinadora de la Unidad de Endometriosis del Hospital Universitario La Paz, en Madrid a Hipertextual.

CAUSAS DEL DOLOR

La Endometriosis es la causa más común asociada al dolor menstrual y si no se trata puede conllevar a futuros problemas de fertilidad. Esta se da cuando el endometrio, la capa más interna del útero, se encuentra fuera de su lugar habitual, es decir, fuera del útero.

"Puede estar en los ovarios, en el intestino... es decir, en los lugares más cercanos al aparato genital. El lugar más habitual en el que se puede encontrar tejido endometrial es en el ovario", refiere la doctora Hernández.

Por su parte, los miomas son tumores benignos y no cancerosos que crecen en el tejido muscular del útero o miometrio, en las mujeres. "A veces endometriosis y miomas van asociados, pero son proliferaciones del miometrio, es decir, el músculo del endometrio", refiere la doctora.

Sólo un 0,5% de los miomas se convierten en tumores malignos en las mujeres (sarcomas). Los sarcomas son cánceres que se originan en los tejidos de los músculos, la grasa, los huesos y el tejido fibroso que forma los tendones.

¿QUÉ HACER?

Cuando se trata de un dolor intenso y permanente, este ya deja de ser algo común y debe despertar las alarmas. Normalmente se tratan los dolores leves con un antiinflamatorio, paracetamol o anticonceptivos.

Sin embargo, otros síntomas que pueden alertar de que se trata de algo más que una dismenorrea normal pueden ser un tipo distinto de dolor que se presenta en otras situaciones y estos pueden ayudar al especialista a dar con lo que le está afectando a la paciente.

"La mujer con endometriosis también tiene dispareunia, dolor durante las relaciones sexuales, y la disquecia, que es dolor al defecar", señala Hernández. 

Ante esta situación es primordial que la mujer con este tipo de dolores acuda a un ginecólogo. A través de una exploración ginecológica y una ecografía transvaginal se podría detectar el problema y así ajustar un tratamiento que normalmente son con analgésicos y hormonales, como los anticonceptivos.

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