Nerdgasmo: Este es el ser vivo más poderoso del mundo y aquí te cuento por qué

Sobrevivir en el espacio para el ser humano es imposible, el vació de este nos mataría en cuestión de segundos por muchas razones, falta de oxígeno, presión, frío, radiación, entre otras muchas cosas realmente muy malas para nuestra salud. 

Nosotros hemos evolucionado en una especie de océano pero que está compuesto de muchos gases, principalmente nitrógeno y oxígeno. Es por eso que al viajar al espacio, debemos meternos en nuestras propias peceras llenas de gas y cerradas herméticamente.

Pero si te dijera que existe un animal que es capaz de sobrevivir a ese ambiente del espacio y a muchos otras situaciones igual de extremas, y sobrevivir como si nada, ¿me creerías?

Su nombre es tardígrado, coloquialmente llamado como 'oso de agua' (sí, este último nombre suena mejor), por tener una apariencia rechoncha y unos movimientos bastante... ¿tiernos? 

DESCUBRIMIENTO

Estos animalitos fueron descubiertos y descritos por primera vez por el zoologo alemán, Johann August Ephraim en 1773, el cual los denominó como oso de agua, por su peculiar forma (parecían osos de peluche cruzados con orugas). Años después, en 1777, el naturalista y sacerdote católico, Lazzaro Spallanzani, los rebautizó con el nombre de tardígrado (que significa ‘de paso lento’). Sin embargo sus grandes habilidades de sobrevivencia extrema no se conocieron sino hasta mucho tiempo después.

En 1983, un equipo de científicos japoneses, en un viaje a través de la Antártida, se topó con un montón de musgo que albergaban a estas muy extraña criatura.

Estos seres y el musgo en el que se encontraron fueron envueltos en papel, colocados en bolsas de plástico y encerrados en un congelador a -20 grados centígrados, en donde permanecieron congelados y olvidados durante más de 30 años.

Y aunque parezca el inicio de una película de terror, cuando los científicos descongelaron a los ositos de agua en 2014, no se esperaban lo que sucedió a continuación. Estos animalitos de un milímetro de tamaño, despertaron como si de un sueño se tratase, y en vez de vengarse de la humanidad por haberlos congelado durante tanto tiempo, lo primero que hicieron fue algo para lo que todos estamos naturalmente programados (¡oh sí!) reproducirse como su nada hubiese pasado. 

Esto sorprendió a los científicos, quienes siguieron aprendiendo de estos animales y sobretodo los límites a los que pueden llegar, pues las diferentes especies de tardígrados tienen diferentes adaptaciones para una amplia variedad de amenazas ambientales, convirtiéndose así en los seres vivos más resistentes del planeta.

CARACTERÍSTICAS

Con cuerpos largos y regordetes y unas cabezas arrugadas, las ositos de agua tienen ocho patas y manos con cuatro u ocho garras en cada una. Tienen un tamaño que varía entre los 0.05 milímetros a 1.2 mm, por lo que no pueden ser apreciados a simple vista, por lo que se requiere del uso de microscopios.

Los ositos de agua se alimentan de líquido para sobrevivir. Chupan los jugos de algas, líquenes y musgo. Aunque se han registrado que algunas especies son carnívoras e incluso caníbales, ya que pueden aprovecharse de otros ositos.

Existen más de 1,000 especies conocidas de Tardígrade, según el Sistema Integrado de Información Taxonómica (SIIT). Estas se reproducen de forma sexual y asexual, dependiendo de la especie.

Durante la reproducción sexual, la hembra pondrá de uno a 30 huevos y los machos los fertilizarán. En la reproducción asexual, la hembra pondrá los huevos y luego se desarrollarán sin fertilización.

RESISTENCIA EXTREMA

Pero lo que sorprende de estos animalitos es que sobreviven a muchas condiciones realmente extremas, al entrar en un estado casi mortal llamado criptobiosis. Se acurrucan en una bola deshidratada, llamada tun, al retraer la cabeza y las piernas. Si este tun se reintroduce en el agua, el tardígrado puede volver a la vida en unas pocas horas, como una resurrección.

Pero ¿a qué se refieren exactamente con resistentes? Pues, a continuación enumeraré las situaciones extremas a las que estos simpáticos ositos de agua han sido sometidos y han logrado sobrevivir:

- En condiciones de calor, liberan proteínas de choque térmico, que evitan que otras proteínas se deformen. En su forma de tun, pueden sobrevivir a grandes cantidades de calor, incluso en agua hirviendo.

- En este mismo estado, pueden sobrevivir, sin agua o atrapados en el hielo, durante décadas. Incluso algunos informes de un experimento en 1948 afirman que se había revivido un tun de más de 120 años de antigüedad.

- Han sobrevivido a cuatro extinciones masivas y los científicos creen que pueden sobrevivir muchas más. Incluso hasta que el Sol envuelva a la Tierra, en aproximadamente 4 mil millones de años. 

- Viven en el océano y en el suelo de todos los continentes, en todos los climas y en todas las latitudes. Han sido descubiertos a 5546 msnm. en una montaña en el Himalaya, en las aguas termales japonesas, en el fondo del océano y en la Antártida.

- Pueden soportar grandes cantidades de radiación, se calientan a 150 ° C y se congelan casi a cero absoluto (-200 grados centígrados).

- Pueden soportar una presión 6 veces mayor que el de la Fosa de las Marianas.

- Su umbral de radiación es 1000 veces mayor que el de los humanos.

- Y lo más reciente, pueden sobrevivir al espacio. En 2007, miles de tardígrados se unieron a un satélite y se lanzaron al espacio. Después de que el satélite regresó a la Tierra , los científicos los examinaron y descubrieron que muchos de ellos habían sobrevivido. Incluso, algunas de las hembras habían puesto huevos en el espacio, y las crías recién nacidas estaban sanas.

El osito de agua es una de las criaturas más fascinantes de este mundo, con unas habilidades de resistencia de las que los seres humanos seguimos aprendiendo.

Con información de Wired, National Geographic, BBC, Cryobiology, Vox, Live Science.