La NASA emitió una alerta respecto de un "asteroide potencialmente peligroso" que esta en "acercamiento" a la Tierra. Sin embargo, no es para alarmarse, ya que se espera este pase a una distancia de 5 millones de kilómetros, el equivalente a 13 veces la distancia entre la Tierra y la Luna.
El asteroide denominado 2016 NF23 tiene entre 70 y 160 metros de diámetro, pasará por la Tierra el 29 de agosto a una velocidad de 9.04 kilómetros por segundo, según informa la NASA en su página Earth Close Approaches, dedicada a informar sobre este tipo de eventos.
Este sería el tercer objeto más cercano a la Tierra, detrás de otros dos asteroides que sobrevolarán la Tierra a principios de setiembre, específicamente los denominados 2001 RQ17 y 2015 FP118.
El 2016 NF23, según sus medidas, sería un poco más pequeño que un Boeing 747 pero con una altura mayor a la de la Gran Pirámide de Giza, informa Fox News.
Recibe la categoría de "potencialmente peligroso" debido a que pasan a menos de 0,05 au (unidades astronómicas) del nuestro planeta. Sin embargo, esto equivale a una gran distancia en términos terrestres.
Cualquier asteroide que se encuentre dentro de ese rango (que equivale a menos de 7 millones de kilómetros de la Tierra) y con un diámetros mayor a los 150 metros se considera como "potencialmente peligroso".
En abril, un asteroide del tamaño de un campo de fútbol, el 2018 GE3, llegó a solo 191 mil kilómetros de la atmósfera de la Tierra, prácticamente la mitad de la distancia entre la Tierra y la Luna.
Al respecto, la NASA presentó en junio, un plan actualizado para proteger la Tierra y predecir las posibilidades de amenaza de un objeto cercano delineando cinco objetivos, incluida la detección mejorada y el modelado mejorado.
El plan de 20 páginas detalla los pasos que debe seguir Estados Unidos para estar mejor preparados para objetos como asteroides y cometas que se encuentran a 30 millones de millas del planeta.
Además de mejorar la detección de este tipo de objetos, el seguimiento, la caracterización de las capacidades y la mejora de la predicción de modelos, el plan también apunta a desarrollar tecnologías para desviarlos, aumentar la cooperación internacional y establecer nuevos procedimientos de emergencia y protocolos de acción.