Redacción PERÚ21

redaccionp21@peru21.pe

Quizá la pintura más famosa del mundo, la '' siempre ha cautivado a los expertos del mundo del arte por su enigmática belleza que se ve reflejada en la delicada pose y la media sonrisa que presenta.

Sin embargo, los doctores Mandeep R. Mehra, de la Escuela de Medicina de la Universidad de Harvard, y Hilary R. Campbell, de la Universidad de California tienen otra explicación a su rara belleza.

Mediante una carta dirigida al editor de la revista médica , estos doctores explican la belleza de la pintura como un síntoma clínico del hipotiroidismo.

“El enigma de la Mona Lisa puede resolverse mediante un simple diagnóstico médico de una enfermedad relacionada con el hipotiroidismo”, refiere Mehra en la .

Los investigadores realizaron una observación especializada de la obra de Leonardo da Vinci, y notaron una serie de rasgos que responderían a este cuadro clínico.

el principal rasgo fue el cuello abultado producto del bocio, enfermedad vinculada a la inflamación de la glándula tiroides y que es originada por la falta de consumo de alimentos ricos en yodo como los mariscos o los pescados.

Ambos investigadores analizaron la dieta alimenticia que comía la población de Florencia de 1503, año en que Leonardo da Vinci comenzó a pintar la enigmática obra, y descubrieron que lo que abundaba eran cereales, tubérculos y legumbres, mientras que las especies marinas eran casi nulas.

Otro de los rasgos detectados fue la "decoloración amarillenta de la piel”, esta sería producto de una falla en el hígado que anula su facultad de convertir el caroteno en vitamina A, según señalan los expertos.

“Una completa falta de cejas y otras vellosidades en su piel pálida apoyan este diagnóstico”, afirman los investigadores. El cabello grueso y reseco que cae en sus hombros también alimentaría esta teoría.

La carta incluso va más allá y menciona algunos aspectos de la vida de la joven retratada que alimentan el diagnóstico, como la condición posparto que sufrió la joven y hasta una posible parálisis facial periférica o parálisis de Bell que motivó su media sonrisa.

HISTORIA DE UNA SONRISA

Este retrato fue uno de los más famosos que el genio italiano, Leonardo da Vinci, empezó a pintar en 1503. Se trata de Lisa Gherardini (1479-1542), esposa del mercader de seda florentino Francesco del Giocondo.

actualmente, esta pintura se encuentra en exhibición en el Museo Louvre en París, Francia.

TAGS RELACIONADOS