La temporada 17 de “Grey’s Anatomy” está en una pausa a mitad de temporada en este momento. Dentro de los seis episodios que se han emitido hasta ahora, esta temporada se abrió justo en medio de la pandemia, con flashbacks ocasionales a cosas de la temporada 16.
Los fanáticos de “Grey’s Anatomy” han visto numerosas relaciones y problemas personales que enfrentan los personajes principales en cada episodio, pero la serie definitivamente es conocida por sus capítulos salvajes y sorprendentes donde, a veces, la ficción se superpone a la realidad que quieren representar.
Y es que no solamente se menciona una, sino varias situaciones donde los personajes tuvieron decisiones cuestionables con respecto a su trabajo o relaciones, decisiones que en un escenario de la vida real, habrían tenido castigos que incluso podrían llevarlos hasta la cárcel por varios años.
Lastimosamente, o afortunadamente para la serie, ninguno de ellos han sido condenados por los delitos que cometen, llegando hasta el ridículo de como un grupo de doctores puede hacer tantas cosas ilegales sin que nadie se de cuenta. Screenrant ha hecho una lista de las 10 peores cosas que hicieron y salieron impunes.
Derek decidió golpear a Mark después de que este le dijera que estaba saliendo con Lexie, lo que llevó a una pelea hasta los puños. Derek debería haber sido arrestado por este incidente y enviado a la cárcel por sus acciones, ya que sucedió en el trabajo, pero ambos hombres salieron del apuro. Ni siquiera el hospital tomó acción legal.
Un DNR significa que una vez que una persona muere, no quiere que se le resucite de ninguna manera. Bailey y Meredith han hecho esto, Meredith en la temporada 2 sin saber que era un paciente DNR y Bailey en la 12 siendo completamente consiente de los deseos de la familia de Omar. Esto requeriría que el paciente y el hospital emprendan acciones legales, pero no pasó.
En la temporada 1 del programa, se reveló que cuando Preston era un compañero, había dejado una toalla quirúrgica en el abdomen de su paciente. Sabía que estaba allí y se olvidó de decírselo a nadie por temor a que arruinara su reputación como cirujano. Admitió su culpa y, en lugar de enviarlo a la cárcel por este encubrimiento, aceptaron su disculpa y le permitieron seguir trabajando en el hospital.
Aunque esto nunca sucedería en la vida real, se ha convertido en algo bastante común a lo largo de las temporadas de “Grey’s Anatomy” que un miembro del personal realice una cirugía no autorizada en un paciente o en sus propios compañeros de trabajo. No solo es poco ético, sino también contra la ley, y casi todos los personajes principales son culpables de esto.
Cuando la sala de emergencias estaba ocupada un día en el hospital, había un paciente rebelde que estaba causando muchos problemas, incluido el robo de la muleta de otro paciente y luego golpearlo con ella. Owen decidió intervenir después de que la seguridad no pudo detener al hombre y terminó con un puñetazo en la cara. Lastimosamente, Owen no es la ley y el paciente probablemente habría buscado una acción legal como respuesta.
La temporada 2 presentó a un paciente llamado Denny Duquette. Su relación con Izzie. Estaba experimentando insuficiencia cardíaca congestiva y fue su ingreso al hospital lo que le permitió a él e Izzie involucrarse sentimentalmente. Las cosas se fueron de control cuando su condición empeoró y el corazón que se suponía debía recibir se volvió inutilizable.
Había otro corazón disponible e Izzie decidió hacerse cargo de llevarlo más arriba en la lista de donantes cortando su cable LVAD. Luego bombeó manualmente su corazón para mantenerlo con vida a pesar de su DNR. Solo empeoró después de que recibió el trasplante, ya que murió debido a un coágulo imprevisto, por lo que muchos fanáticos ven que fue como si Izzie fuera quien lo mató.
Una mujer embarazada quería que Addison la ayudara a evitar que tuviera más hijos sin decírselo a su esposo, ya que él no creía en la anticoncepción. Addison quería que la mujer firmara los formularios de consentimiento, pero se negó en caso de que su esposo descubriera que era idea suya desde el principio.
Karev no estuvo de acuerdo y confesó la verdad a todos. Sin embargo, en lugar de ir a la cárcel, su seguro pagó los daños y pudo continuar con su vida. Esta fue una de esas ocasiones en las que Addison debería haber hecho todo según las reglas, pero no fue así y tampoco recibió un castigo por ello.
Meredith era parte del equipo que realizaba un ensayo clínico de un medicamento que podría ayudar a los pacientes de Alzheimer, pero lo arruinó. La esposa de Richard Webber, Adele, fue parte del juicio y Meredith se aseguró de que recibiera el medicamento.
Arruina todo el juicio ya que ella se metió con los parámetros al elegir quién no recibiría el placebo, y la habría llevado algún tiempo a la cárcel. Esta no es solo una violación en la comunidad médica que le habría costado un trabajo, sino que probablemente habría sido procesada por sus acciones eliminando toda posibilidad de que regresara a algún hospital.
Leah, una de las residentes de la temporada 9, decidió intentar darle una transfusión de sangre a un testigo de Jehová, a pesar de que va en contra de su religión. Afortunadamente, la detienen antes de que pueda completar el procedimiento, pero aún así habría sido procesada por sus acciones. Todo fue captado por la cámara por el médico remoto y el hospital se habría visto obligado a presentar cargos en su contra.
Jo estaba pasando por un momento difícil en la temporada 15 y decidió que presentarse borracha al trabajo era algo aceptable. Desafortunadamente, esto haría que un empleado sea arrestado en el mundo real, pero de alguna manera Jo fue enviada a casa sin consecuencias reales.