(Foto: Pexels)
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Durante la crisis sanitaria el uso de las creció enormemente al convertirse en uno de los principales medios para comunicarse, entretenerse e informarse. Solo en el 2021, Facebook, Instagram y Twitter alcanzaron 3.5 millones de publicaciones y 1,500 millones de interacciones por post en redes (un promedio de 373 interacciones por publicación), de acuerdo al estudio “Estado de Social Media 2022″ de Comscore; sin embargo, el uso desmedido de estas plataformas es una de las principales causas de adicción, siendo considerada una enfermedad mental que se desarrolla cada vez con más frecuencia.

“Para lograr un buen uso de las redes sociales se debe de tener cuidado con la información que se comparte, debido a que distintas personas pueden acceder a ella sin mucha dificultad. Lo mejor es establecer algunas normas básicas para su uso, por ejemplo, los horarios de uso y el tiempo frente a los aparatos electrónicos, especialmente, cuando se trata de menores de edad (niños y adolescentes). Generalmente, un adulto puede tener un uso responsable de las redes sociales, por lo que la supervisión a sus hijos e hijas es imprescindible. No existe una edad fija para su uso, pero cuanto más tarde, mejor”, señala la Dra. María Elena Escuza, directora de la Escuela de Psicología de la Universidad Norbert Wiener.

Por ello la especialista nos indica cinco recomendaciones para lograr un uso responsable y supervisado de las redes sociales para evitar caer en una ciberadicción:

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  • Evita pasar mucho tiempo frente a las redes sociales: El uso desmedido de las redes sociales pueden generar depresión, ansiedad, problemas de sueño e inseguridad. Caer en comparaciones por las publicaciones de otras personas puede ser perjudicial para la salud mental.
  • Cuida el contenido que expones: Un gran error que se comete constantemente en las redes sociales es exponer las actividades diarias y a tu familia, resultando ser algo peligroso. Recuerda que las redes sociales conectan con todo tipo de personas, por lo que es posible que los usuarios con malas intenciones vean lo que publicas y ello pueda poner en riesgo tu salud mental y física.
  • Habla del uso responsable de las redes sociales: Es importante dialogar en el hogar acerca de lo bueno y lo malo del uso de las plataformas, sobre todo, con los menores de la casa, esto ayudará a que se familiaricen con hábitos que no pongan en peligro su salud física ni emocional.
  • Antes de compartir información, verifica que sean de fuentes confiables: Lo recomendable es que el contenido a compartir tenga información actual, cite a las fuentes de donde proviene y esté verificada por espacios confiables.
  • Evita reenviar en formato de “cadena” información a tus contactos: En ocasiones las noticias que son enviadas en este formato son falsas o también conocidos como fake news. Corrobora la información antes de difundirla.

“El control parental es un mecanismo usado por adultos para vigilar en diferentes sitios web, sistemas operativos o equipos el acceso y el uso que los menores de edad le dan a internet. A través del control parental podemos monitorear la navegación, restringir contenidos no aptos para menores y bloquear páginas o usuarios que puedan ser una amenaza para los niños”, añade Julio Córdova Forero, docente de la carrera de Ingeniería de Sistemas de la Universidad Norbert Wiener.

El especialista señala, además, que es importante utilizar una contraseña potente que no sea la misma para todas las cuentas online existentes, tener mucho cuidado con los sorteos que parecen atractivos con enlaces sospechosos, configurar la privacidad de todas las redes que manejan los niños, niñas y adolescentes, controlar lo que se publica y, sobre todo, reflexionar con ellos y ellas antes de difundir una foto o contenido.

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