Luego de este comentario, Jorge decidió hacer caso a la indicación y así continuar con el viaje: “Yo le dije: ‘No, nada; chao, el último’, y empecé a subir. Pero decido voltearme, todo ‘hasta luego chicas’, y me caigo. Cuando me levanto, las azafatas estaban ahogadas de la risa; las otras ahogadas de la risa; los aviones, todos en la pista parados. Yo decía: ‘¡Dios mío, trágame tierra!’”, añadió el intérprete colombiano.