Recientemente se estrenó “El Hombre Gris”, un nuevo proyecto cinematográfico de Netflix, dirigido por los hermanos Russo (famosos por ser las mentes creativas tras Avengers: Endgame y las películas del Capitán América). Ahora nos brindan una clásica historia de espías llena de acción e intriga.
La película trata sobre Seis (Ryan Gosling), un sicario que es contratado por la CÍA para ser enviado en misiones específicas. Gosling, queriendo evitar la prisión, se une a la organización por varios años, y todo va en orden hasta el día que no llega a cumplir cierto asesinato. La CÍA, queriendo evitar sus indagaciones, manda a Lloyd Hansen (Chris Evans), un excompañero de la organización con tendencias psicópatas, para deshacerse de él. Con su ingenio y la ayuda de su compañera de trabajo, Dani (Ana de Armas), Seis acabará viajando por casi todo el mundo para evitar acabar en las sangrientas manos de Hansen.
La película es todo un espectáculo en cuanto las escenas de acción; cada vez que los personajes acaban en persecución, se puede garantizar que la escena acabará en una explosión que dejará a la audiencia emocionada. Las peleas están coreografiadas de una manera que podamos distinguir bien los movimientos sin perder el dinamismo de la batalla en cuestión. Para aquellos que disfrutaron de los elementos “thriller” de las películas del Capitán America, no se defraudarán con lo que sale plasmado en escena.
El elenco también da lo mejor de sí. Ryan Gosling da cierta vulnerabilidad a su papel; mientras que Chris Evans llega a presentar una faceta nueva de su carrera; dejando atrás el patriotismo y escudo americano del Capi para en cambio cargar con el rol de un lunático sediento de sangre. El actor tiene más talento de lo que normalmente creíamos.
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El único dilema de la película que no a todos les entusiasmará es que el guion llega a ser relativamente sencillo, a pesar de las emocionantes escenas de acción. La audiencia estará maravillada con las explosiones, pero luego no podrán recalcar mucho sobre la complejidad de los personajes.
Aún así, es cine palomitero del bueno. Para aquellos que extrañan esa sensación de adrenalina, es ideal.