Ya adulto, con una carrera en ciernes, Woody intentó sacar a su padre Charles de la cárcel, tratando por la vía legal. Sus intentos de que tuvieron un nuevo juicio, sin embargo, no dieron resultados, a pesar de que gastó cerca de 2 millones de dólares en el proceso. La justicia estadounidense fue reacia porque el crimen que había cometido no era poca cosa.