Redacción PERÚ21

redaccionp21@peru21.pe

Ella lo advirtió. Su personaje era totalmente diferente a lo que había hecho en su prolongada carrera. Pero nadie esperaba ver a Verónica Castro fumando marihuana en , serie que empezó a emitirse este viernes en Netflix.

“No tiene nada que ver con los papeles que haya hecho antes. Le ofrezco disculpas a la gente que me conocía de antes, porque no van a encontrar a Mariana, ni a Rosa, olvídense de eso, ya pasó, ya fueron las telenovelas... Soy exactamente lo contrario de lo que ustedes han visto en mi vida y mi carrera artística, soy otra persona, otro personaje, otro momento de mi vida”, declaró la actriz días atrás al diario mexicano El Universal.

Netflix
Netflix

Y no exageró nada. Estresada por la situación familiar que afronta, Virginia (Verónica Castro) busca relajarse. 

Su personaje que ha fascinado a los que ya han visto la serie (en las clásicas maratones de Netflix) no tendría segunda parte. 

“Aquí yo creo que es mi fin. Con esta temporada es mi fin (en la serie). Se acabó esta mujer. ¿Qué más quieren ver de ella? A la mejor quieren, pero yo ya no. Porque a ver dime, qué mier… vas a ver de esta mujer. ¿Qué más se te ocurre que pueda hacer?”, dijo tajante durante una mesa redonda con varios medios para hablar de la serie, según cita la revista Quién.

Su mayor temor para no aceptar una segunda temporada de la serie es la decadencia: "Yo creo que ya sería la decadencia. Tiene que venir más vieja, más marihuana. Como para entregar casi el equipo. Ya no le puede pasar mucho más. ¿Más carbona? A los 70 años ya no te dan. Hagan lo que quieran, me vale m… lo que hagan. Ya no tienes fuerza para levantar ni siquiera la mano. Pero bueno, ahí veremos. A ver si les aguanto, con mucho gusto aquí me verán”.

CONSEJO A SUS HIJOS

Hasta que empezó a grabar la serie de Manolo Caro, Verónica se enteró de que su personaje fumaba  marihuana, lo cual la llevó a pedir consejo a sus hijos, Cristian y Michel, para saber si debía aceptar o no: “Me dijeron: ‘Mamá, es lo menos que puedes hacer. Hello. Qué antigua. Lo que menos puede hacer una señora de tu edad en la pantalla es fumar marihuana’. Empecé a checar Netflix y me clavé y dije ‘Sí, todo mundo se mete cosas y yo aquí como sonsa’.

“Siempre me negaba a dar un mal ejemplo en la pantalla porque es por escuela. Te decían: ‘No debes de fumar’. Yo era una fumatérica asquerosa, que me fumaba una cajetilla completa o más, y tenía que salirme o fumar atrás del sillón y estarme escondiendo porque no puedes dar mal ejemplo. Ahora es al revés”, explicó.