Juan Flores está en el ojo de la tormenta. La patada en la cabeza que le aplicó a Mauro Cantoro ha dado la vuelta al mundo, mientras que el conato de bronca que tuvo con su colega Johnny Vegas pasó a engrosar su larga lista de líos en la cancha. En ambos casos, sin embargo, el arquero de Comercio se declaró inocente.
«Fui a la pelota, no soy mala leche. Recogí algo la pierna, de lo contrario lo hubiera abierto. Mauro es mi amigo, salimos campeones en la ‘U’. Le ofrecí disculpas y todo quedó bien», dijo Flores, quien no fue expulsado por esa acción.
«Vegas fue malcriado. Me mentó la madre y me metió un cabezazo que la TV no muestra. Si quiere pelear, que sea boxeador. Lo mío es el fútbol, con esto doy de comer a mis hijos. Pero, ojo, yo también he sido boxeador. Que no se equivoque, manco no soy», finalizó.
