Después de ganarle al Palmeiras por la mínima en la ida, el Corinthians de André Carrillo se acabó coronando como campeón del estadual Paulista con un muy luchado empate a cero.
En la primera mitad, las faltas, los empujones y los reclamos marcaron la pauta de un duelo donde el timão tenía la ventaja de la ida y, como tal, cerró sus filas para impedir arremetidas.
Todos los espacios fueron cerrados y los circuitos cortados. El equipo de Ramón Díaz no quería perder la final del Paulistão y mucho menos en un clásico; por ello, se priorizó la defensa.
Así, el coringão dejó sus ataques a los contragolpes de André Carrillo, de José Martínez, que acabó siendo expulsado, de Garro y, sobre todo, de los atacantes Memphis Depay y Yuri Alberto.
A los 27′, la mejor chance ocurrió luego de una combinación entre el neerlandés y el argentino por izquierda, que terminó la jugada con un potente disparo que impactó en el travesaño.
En el segundo tiempo, necesitando marcar -por lo menos- un gol que fuerce los penales, el Palmeiras buscó más el ataque, pero se encontró con los mismos problemas de la primera mitad.
A los 49′, Raphael Veiga asistió a Vitor Roque, pero el atacante del verdão no logró finalizar. A los 58′, el exBarcelona sufrió un penal, pero sólo hizo inmortal al golero del coringão, Hugo Souza.
Sin poder presionar, el Corinthians administró bien el tiempo con André Carrillo, principalmente después de un tumulto iniciado por Depay y donde vieron la roja Martínez y Lombra, ambos en el banco.
En el agregado, Yuri Alberto tuvo una chance de lujo cara a cara con Weverton, el portero del verdão, que también se hizo inmenso, pero no inmortal, porque fue el Corinthians quien ganó la final.
