Una repentina tormenta acompañada de una lluvia torrencial inundó el martes la ciudad de Montreal, capital de la provincia de Quebec (Canadá), lo que afectó varias edificaciones como hoteles y bibliotecas, además de los servicios de transporte como el metro, informó el Huffington Post.
En solo pocos minutos, las calles de esta ciudad quedaron completamente inundadas. Debido a ello, el olor a desagüe se sintió en la metrópoli, sobre todo en las zonas cercanas al puerto. Hasta el momento, no se han reportado heridos ni muertos.
Videos ciudadanos muestran los estragos que dejó este fenómeno natural.