PRECEDENTE. En Juzgado Unipersonal de Huancayo se dictó la mayor sentencia por este tipo de agresiones. (Andina)
PRECEDENTE. En Juzgado Unipersonal de Huancayo se dictó la mayor sentencia por este tipo de agresiones. (Andina)

Vivió 35 años un calvario y finalmente se decidió a vencer el miedo y denunciar a su verdugo, Jesús Feliciano Rojas de la Cruz, de 59 años, quien fue condenado por el Juzgado Penal Unipersonal de Huancayo, en , a ocho años de prisión por maltrato psicológico. El daño psíquico que sufrió María Esther Atencio Estrella, de 55 años, de parte de quien fuera su esposo, sin embargo, es grave e irreversible. Requiere tratamiento psiquiátrico especializado con urgencia.

La pareja se conoció en 1980, cuando ella tenía 16 años y un año después se casaron. Desde ese entonces, Esther vivió una pesadilla. Los descalificativos, humillaciones y golpes eran constantes y no frenaron ni con el nacimiento de sus dos hijos, ahora mayores de edad.

Después de 30 años, el matrimonio se disuelve e incluso Rojas de la Cruz tenía otra pareja, pero la mujer seguía siendo acosada y maltratada.

DENUNCIA

El 23 de julio de 2016, el agresor entró en la casa de Esther, cuando ella estaba viendo televisión en su habitación, y bajó la llave general de la luz. Ella salió a ver qué sucedía y encontró a su exesposo, quien la insultó y agredió enojado porque no había atendido sus llamadas telefónicas. Esa vez decidió denunciarlo y, tres años después, el Poder Judicial le dio la razón.

En el juicio oral, la fiscal Katy Zárate, de la Primera Fiscalía Provincial Penal Corporativa de Huancayo, logró sustentar la acusación con el peritaje psicológico de Medicina Legal y testimonios. Es la mayor sentencia por violencia psicológica que se ha dado en el país.

TENGA EN CUENTA

- El Ministerio Público recomienda a los denunciantes de violencia familiar no abandonar el proceso. En muchos casos las víctimas retoman la relación por miedo o dependencia económica.

- La Fiscalía en Junín tiene cuatro casas de acogida que brindan apoyo a las víctimas.