La ilegalidad de las actividades y negocios de Miguel Arévalo (a) ‘Eteco’ vuelven a salir a la luz con la revelación de que, para obtener la ciudadanía estadounidense, habría fraguado documentos en los que se consigna que su lugar de nacimiento es Lima, cuando en realidad él es natural de Tocache.

Todo indica que, de haber presentado su partida de nacimiento real, las autoridades norteamericanas se lo habrían pensado más de dos veces antes de extenderle la nacionalidad, ya que, como es fácil colegir –con las respectivas disculpas a los ciudadanos honorables que han nacido o viven allá–, la leyenda negra de la ciudad en los 90, ubicada en la región San Martín, no se debe precisamente a una canción de Miki González.

Los documentos publicados ayer por Perú21 no dejan lugar a dudas: el hombre es un tocachino de pura cepa, y una cepa “de la buena”. Como se recordará, el así llamado Clan ‘Eteco’, del que Arévalo sería cabecilla, venía siendo investigado por el fiscal de Crimen Organizado, Álvaro Rodas, y el oficial Walter Lozano, de la Dirección Antidrogas de la Policía Nacional, desde el año 2018, en un caso que implica tráfico de drogas y colaboración con el terrorismo. En diciembre de 2019, un juzgado de la zona admitió a trámite un hábeas corpus presentado por los abogados de ‘Eteco’, lo que entorpeció la investigación. Pero no la paralizó. Es así que, de extraña manera misteriosa, Arévalo huye, aparentemente usando el río en el límite con Colombia, cruzando el puesto fronterizo Santa Rosa, en Loreto, y acabó en los Estados Unidos, donde reside gracias a su doble nacionalidad.

Arévalo (55) llevaría en el tráfico de estupefacientes alrededor de 40 años, ya que se habría iniciado en el negocio durante la década de los ochenta, como un simple acopiador. Entre 1989 y 2017 sus actividades ilícitas cobrarían la enorme escala que les dio visibilidad en los radares de la PNP. La DEA, que también le sigue los pasos desde hace años, acaba de solicitar a las autoridades peruanas toda la documentación que publicamos ayer. La falsificación de documentos es considerada un delito federal en los EE.UU. Puede entonces que los días de ‘Eteco’ en los soleados parajes de Weston, Florida, donde ahora reside, estén contados.

TAGS RELACIONADOS