El Congreso modificó artículo de la Ley Universitaria y ahora los profesores universitarios pueden enseñar hasta las 75 años. (USI)
El Congreso modificó artículo de la Ley Universitaria y ahora los profesores universitarios pueden enseñar hasta las 75 años. (USI)

La educación es, sin lugar a dudas, uno de los pilares de toda nación para mejorar la calidad de vida de sus ciudadanos. La Constitución establece que “tiene como finalidad el desarrollo integral de la persona humana”. Una de las etapas claves de esta actividad formativa es la educación superior y es aquí donde estamos encontrando serias falencias al considerar erróneamente que a más universidades hay mayor capacidad profesional al servicio del país.

Existe la Ley de Moratoria (Ley N°29971), que tiene como propósito evitar la proliferación de universidades públicas y privadas en el país, pero esta norma ya no está en vigencia. El 22 de diciembre de 2017 terminó su validez, que era por cinco años.

La Comisión de Educación aprobó el 4 de diciembre, casi por unanimidad –solo con el voto en contra del kenjista Lucio Ávila–, la ampliación de su vigencia por dos años más. El dictamen, sin embargo, fue rechazado por el Pleno el 9 de enero, mientras juraba el autodenominado ‘gabinete de la reconciliación’, y hasta hoy el tema se mantiene en la nebulosa. El 17 de enero último, hace ya más de un mes, la entonces jefa de la Sunedu, Lorena Masías, decía que había en el Congreso más de 20 pedidos de creación de universidades.

¿Cuántas solicitudes habrá al día de hoy? Es algo que el Ejecutivo y el Congreso deberían estar monitoreando. El ministro Idel Vexler invocó el jueves pasado a aprobar la prórroga “por el bien de la educación superior”. No es un secreto la ingente cantidad de universidades que existen en el Perú ni tampoco los bajos índices de calidad en la gran mayoría de estas, algunas incluso sin un local para dictar clases. De las 142 que tenemos, apenas tres figuran en los rankings mundiales de calidad y no en los primeros lugares.
El Perú es el segundo país con más universidades en Sudamérica, solo por detrás de Brasil, que tiene una población siete veces mayor. España tiene 83 centros universitarios para 46 millones de habitantes. ¿Necesitamos más en nuestro país?

Antes de eso, se debería poner también atención al tema del licenciamiento que otorga la Sunedu, ahora bajo una nueva titular, Flor Luna Victoria, que no ha sido nombrada con las expectativas que una función de su relevancia exige y con cuestionamientos.

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