"La JNJ puede haber hecho un buen o mal trabajo, eso debe ser evaluado. Pero cuando la política se ejerce sin buscar la legitimidad, se incuba una crisis institucional que cuando la amalgama que la creó se despedace sabe Dios a dónde nos lleva. Amalgamados e imprudentes".
"La JNJ puede haber hecho un buen o mal trabajo, eso debe ser evaluado. Pero cuando la política se ejerce sin buscar la legitimidad, se incuba una crisis institucional que cuando la amalgama que la creó se despedace sabe Dios a dónde nos lleva. Amalgamados e imprudentes".

Lamento coincidir con Juan Carlos Tafur respecto de que todo apunta a que el Congreso destituirá a los miembros de la Junta Nacional de Justicia. Si bien El Comercio informa que todavía faltan 18 votos, también reporta que 40 congresistas no han fijado posición, incluyendo 10 de APP, 9 de Podemos, 8 del Bloque Magisterial, 5 de Acción Popular (la bancada, expectorados del partido). En este Congreso de amalgamas extrañas, ya verán con qué se consigue los votos que faltan. Reitero que , entre ellos algunos de los todavía indecisos. Coincidentemente, la moción claramente abusiva que aprobó una investigación sumarísima de dos semanas logró 84 votos, nada menos. El plazo fue ampliado luego, pero igualmente es de una rapidez inusitada frente al trato que recibe todo otorongo que nos irrespete, desde el acusado de violación que duró 6 meses, hasta todos los que han sido blindados hasta la náusea.

Una falta grave debe, idealmente, estar tipificada, si no lo está tiene que ser casi indiscutible, no opinable. El caso más sólido, que es el de la edad de la Dra. Tello es algo que ella planteó durante el proceso de selección, sin que nadie se escandalizara. Los informes jamás los pidieron, un comunicado puede no ser cauto, pero difícilmente califica como falta grave. Varias entidades internacionales y gobiernos han mostrado preocupación, incluso la última visita a la OEA ha permitido que se expresen y el gobierno ha tomado nota e informado de ello, pero el Congreso probablemente vaya hasta el final.

Tafur resume este despropósito como “una mezcla de intento de controlar organismos electorales (ONPE y Reniec), venganza de los “hermanitos” y razzia caviar”. Sumaría que también hay un interés básico por demostrar poder y avasallar, o te alineas rapidito o te boto. Una especie de deja vu de cuando Fuerza Popular controlaba el Congreso con PPK, pero en versión amalgama multiforme, que funciona temporalmente como un todo, hasta que el pegamento pierda efectividad y se desmorone. Esa misma amalgama no fue capaz de conseguir 87 votos para la bicameralidad y la posibilidad de reelección, a pesar de que eran buenas reformas y eran convenientes a quienes votaban.

Si hay varios motivos y varias partes en la amalgama congresal, cabe preguntarse qué motiva a cada parte y si es estable en el tiempo. El pegamento que va a durar hasta el final es el identificado por Martín Hidalgo hace rato: 91 ganan más del doble hoy que antes de ser congresistas, hasta el último cheque cuenta, pero no todo tiene ese misma capacidad adhesiva.

El mayor grado de influencia sobre quién manejará la ONPE, por ejemplo, no le sirve sino a los poquísimos partidos más sólidos, y eso no suma 87 votos. Si no pudieron juntarlos siquiera para aprobar la reelección (igual no serían reelegidos por sus índices de aprobación), ¿qué ganan los chiquitos amalgamados? Salvo la hinchazón pasajera del ego, nada.

Es claro que la obsesión anticaviar es compartida por los extremos, ¿pero es así en los grupos más pequeños? Incluso hay trascendidos de que quienes reemplazarían a los actuales miembros de la JNJ serían más cercanos a esa cada vez más ambigua calificación.

Más grave y necesario de aclarar es lo que Tafur describe como venganza de los “hermanitos”: ¿quiénes, específicamente, tienen esa motivación dentro del Congreso? Ha sido la Fiscal de la Nación, Patricia Benavides, la que hizo cambios en el equipo a cargo de esa investigación bajo el argumento poco claro de “clima laboral”, .

La JNJ puede haber hecho un buen o mal trabajo, eso debe ser evaluado. Pero cuando la política se ejerce sin buscar la legitimidad, se incuba una crisis institucional que cuando la amalgama que la creó se despedace sabe Dios adonde nos lleva. Amalgamados e imprudentes.