Difícil situación. La falta de alimentos en Venezuela ha obligado a la ciudadanía de este país a consumir (y vender) comida para animales para así poder sobrevivir.
Este es el caso de los embutidos para perros, los cuales son envasados como salchichas y vendidas de forma congelada. Estos productos están compuestos por "huesos de pollo triturados".
Así lo consignó el Programa Venezolano de Educación Acción en Derechos Humanos (Provea) en un reciente informe sobre la crisis humanitaria que atraviesa el régimen de Nicolás Maduro.
De acuerdo con esta institución, varios venezolanos, por necesidad, compran estos embutidos y los fríen con huevos revueltos o arroz para no sentir el sabor.
Esta investigación tuvo el aporte de la nutricionista Yazarenit Mercadante, de la Fundación Bengoa, quien indicó que aquellas salchichas para perros "pueden estar contaminados con partículas de todo tipo que emana el animal cuando no es tratado adecuadamente".
La denuncia fue recogida por el diario El Universal, el cual consignó que "comprar ingerir alimentos para animales se ha convertido en una práctica normal para muchos venezolanos en el país".
Según Provea, que esta situación esté ocurriendo es una dramática consecuencia de la violación del derecho a la alimentación por parte del gobierno de Nicolás Maduro.