Cuba se convirtió en uno de los principales temas de un evento al cual su Gobierno no fue invitado, ya que diversos mandatarios que asistieron a la VI Cumbre de las Américas, en la ciudad colombiana de Cartagena, le increparon a Barack Obama que continúe la tensión hacia el régimen comunista.
"Así como sería inaceptable otra cita hemisférica con un Haití postrado, también lo sería sin una Cuba presente", dijo Juan Manuel Santos, mandatario de Colombia y anfitrión del evento. "Es tiempo de superar la parálisis que lleva a la terquedad, por el bien del pueblo cubano", añadió.
El gobernante pidió a todos los asistentes "tender puentes" para superar esas diferencias porque "el aislamiento, el embargo, la indiferencia, el mirar a otro lado, han mostrado ineficacia".
"En nuestra opinión eso es correcto", dijo Ollanta Humala durante su estadía en el evento. "Tienen que estar todos los países latinoamericanos representados", comentó al tratar el tema de la inclusión de Cuba.
Al respecto, el presidente Barack Obama comentó que esas discusiones sobre Cuba le hacen sentir como si estuviera en la "diplomacia de la Guerra Fría", cuando ni siquiera había nacido. "Ese no es el mundo en el que vivimos hoy (…) Mi esperanza es que seamos conscientes de la oportunidad que tenemos", sostuvo.