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Redacción PERÚ21

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Muchos deberían imitarla. La primera dama de Francia, , se comprometió a ser más prudente a la hora de 'tuitear', tras el revuelo político que causó un mensaje enviado por la pareja de a través de la red social, donde apoyaba al rival político de la exesposa y madre de los hijos del mandatario, la socialista Ségolène Royal.

Como se recuerda, Trierweiler publicó el pasado 12 de junio un mensaje de apoyo para las pasadas elecciones legislativas a Olivier Falorni, de quien aseguró "lucha junto a los rochelanos (habitantes de La Rochelle, ciudad a cuya diputación se presentaba Royal) desde hace tantos años con un compromiso desinteresado".

"Me cruzaré de brazos siete veces antes de mandar un tuit" aseguró la primera dama durante una visita a la ciudad de Brest junto al mandatario, tras las celebraciones en París por el .

Tras su mensaje en la red social, en plena campaña electoral se desató en el país galo toda una polémica en torno al papel que desempeñaría la primera dama francesa, quien además había manifestado que continuaría ejerciendo su labor periodística a pesar del triunfo electoral de su esposo.

En tanto, Hollande evitó criticarla a pesar que se vio envuelto , pero reconoció que la función de Trierweiler "no es fácil". Consultado sobre el tema en una entrevista televisada después del desfile militar del sábado, Hollande dijo que "los asuntos privados se arreglan en privado".