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Redacción PERÚ21

redaccionp21@peru21.pe

Gracias a la invitación del profesor Martín Yarlequé, pasé unos días de trabajo en la Escuela Superior de Arte Pública Ignacio Merino de Piura. Aunque este viaje coincidió con el desastre natural en el norte, es la dinámica cultural de esta ciudad un punto de reflexión.

Ciertamente, lo más preocupante es la falta de espacios culturales. De manera solitaria, el Museo Municipal Vicus –con un extraño diseño arquitectónico– enfrenta problemas de presupuesto y de gestión.

En Piura no existe comercio artístico y la tradición es la pintura moderna. Por lo tanto, ¿cuál es el horizonte para la escena cultural? Es la docencia, y el círculo vicioso que implica.

En consecuencia, es la Escuela Ignacio Merino la que debe continuar fomentando los intercambios entre las escenas locales; y despertar el interés por incluir microgestiones culturales en las políticas públicas de la Municipalidad Provincial y del Gobierno Regional de Piura. Todo esto en un contexto donde existen fondos del canon minero.