Reciclar y reutilizar plásticos es una gran manera de evitar que estos residuos contaminen el medio ambiente, así como brindar oportunidades laborales a numerosas personas. (Foto: Junior Zagaceta)
Reciclar y reutilizar plásticos es una gran manera de evitar que estos residuos contaminen el medio ambiente, así como brindar oportunidades laborales a numerosas personas. (Foto: Junior Zagaceta)

El reciclaje de dejó de ser, hace ya muchos años, una ‘posible solución’ al incremento excesivo de basura . Hoy se volvió una necesidad crucial que debe tratarse con seriedad, tanto por la sociedad civil como por los gobiernos locales, regionales y central.

Ante la situación desbordante que significa la producción de desechos plásticos, varias empresas del sector privado proponen métodos sostenibles para el aprovechamiento de estos residuos a través del reciclaje y así evitar que terminen en rellenos sanitarios o, pero aún, en ríos y océanos, en donde tienen que pasar miles de años para que se degraden totalmente.

En esta línea, Pamolsa, Recicloplas y Cencosud han unido fuerzas para tratar, entre otros desechos, el Pet (Tereftalato de polietileno), una de las muchas variedades de plástico que tiene como características principales su transparencia y la capacidad para mantener alimentos en buenas condiciones de manera inocua, tal como lo explica Enrique Sarco Valdivieso, Director de Responsabilidad Social Empresarial de Pamolsa.

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El destino que debería tener el plástico

Seguramente se habrán topado con algún reciclador que busca en la basura las botellas de gaseosas y demás bebidas, que procede a recolectar y guardar. Este tipo de plástico transparente o Pet, es uno de los más valiosos para el reciclaje, ya que de su proceso se pueden confeccionar nuevos envases que son utilizados para el almacenamiento de alimentos.

Estas botellas y demás plásticos pet que se recolectan de muchos puntos del país, se juntan y comprimen en grandes bloques denominados pacas, que se acumulan en la planta de reciclaje a la espera de unirse al tratamiento. “El proceso inicia con la recepción de las pacas, que son previamente seleccionadas por los recicladores, en material y color. Estas son prensadas para hacer la logística más eficiente y pueden provenir de muchos lugares del Perú”, indica Sarco.

Las pacas pueden llegar a pesar hasta dos toneladas, sin embargo, esto depende de donde procedan, pues en algunas regiones el volumen tiende a ser menor. (Foto: Junior Zagaceta)
Las pacas pueden llegar a pesar hasta dos toneladas, sin embargo, esto depende de donde procedan, pues en algunas regiones el volumen tiende a ser menor. (Foto: Junior Zagaceta)

“El material se desempaca para hacerlos pasar por un tambor rotatorio donde se van desprendiendo algunos contaminantes que pueden estar adheridos al material Pet”, agrega.

Posteriormente, se pasa por una faja en donde se eliminan otros contaminantes, además de separar materiales excesivamente contaminados. Esta parte del proceso se hace de manera manual en una línea de tratamiento.

Este material es triturado en su totalidad, incluso las tapas y etiquetas de las botellas. Sin embargo, no todo es usado para la fabricación de los nuevos envases de pet. “El resultado pasa por un tanque de flotación, en donde por diferencia de densidades, el Pet se hunde, mientras que el reto de materiales flota. Así se separa el material aprovechable”, señala el representante de Pamolsa.

Pero, el otro material plástico, del que están conformadas las tapas y etiquetas, tampoco son desechadas. Este material sirve para otro tipo de productos y su destino es otro. Todo se aprovecha.

El proceso se enfoca, principalmente, en la correcta limpieza del material reciclable, para poder obtener plástico Pet utilizable e inocuo, que pueda estar en contacto con alimentos sin dañar nuestras salud. (Foto: Junior Zagaceta)
El proceso se enfoca, principalmente, en la correcta limpieza del material reciclable, para poder obtener plástico Pet utilizable e inocuo, que pueda estar en contacto con alimentos sin dañar nuestras salud. (Foto: Junior Zagaceta)

“Una vez el Pet está separado, pasa por un proceso de secado y almacenaje temporal, antes de ser lavado. Este proceso se da en agua caliente, a 80 grados centígrados, y con soda cáustica. Luego pasa por dos tanques de enjuagado y aclarado, en donde se eliminan los restos del material que se usa para la limpieza. Se vuelve a secar y se reúnen en pacas de cerca de una tonelada de escamas de Pet de alta calidad”, añade.

Este material es dirigido a otra planta, en donde pasa por un nuevo proceso de descontaminación aprobado por la Food and Drug Administration (FDA), a través del cual, este material se vuelve 100% seguro para estar en contacto directo con los alimentos.

Reciclaje de plásticos Pet
Experto nos indica el proceso que se sigue para el reciclaje de este tipo de plástico.

El proceso que debe iniciar en casa

El proceso de reciclaje, hoy en día, nace de los botes de basura. Diversas personas dedicadas al reciclaje, la gran mayoría de manera informal, buscan en la basura de las calles los componentes de una cadena que se vuelve crucial para la sostenibilidad ambiental de cualquier ciudad.

Sin embargo, en Lima, pese a que el material que se recupera de la basura para su reciclaje es grande, este es significativamente pequeño en comparación a todo lo que llega al relleno sanitario, o peor, termina contaminando los ríos y océanos.

Es por eso que es de vital importancia que esta labor inicie desde casa, haciendo más fácil el trabajo de los recicladores a través de la segregación de la basura. Pues el simple acto de separar nuestra basura por categorías (Material reciclable como papel, vidrio o plástico) es el primer impulso de esta cadena de reciclaje.

Por otro lado, iniciativas como la alianza entre Cencosud y Pamolsa, dan la oportunidad a que el trabajo de los miles de recicladores sea más seguro, además que les permiten tener mucho más volumen de material para reutilizar. Esto es muy importante, pues es el inicio de una cadena circular muy eficaz y favorable para la economía y para el medio ambiente.

El reciclaje de plásticos reutilizables, que concluyen un proceso que da trabajo a muchas personas y es saludable para el medio ambiente, es una cadena que debemos iniciar nosotros mismos desde casa. (Foto: Junior Zagaceta)
El reciclaje de plásticos reutilizables, que concluyen un proceso que da trabajo a muchas personas y es saludable para el medio ambiente, es una cadena que debemos iniciar nosotros mismos desde casa. (Foto: Junior Zagaceta)

“Es importante separar este tipo de envases, todo tipo de plásticos y en general los materiales reciclables, porque sin esta acción nuestra no empieza la cadena de reciclaje. Para que este producto pueda ser recuperado va a depender, si hay suerte, de que un reciclador informal abra tu bolsa de basura antes que el camión se lo lleve y logre rescatar este producto. Si no separamos, todos estos residuos van a terminar enterrados en un relleno sanitario o un botadero informal. En Perú, más de la mitad de la basura va a parar a un botadero informal o a contaminar ríos, playas y mares. Esto pasa si no separamos. Tenemos que darle ese primer impulso a la cadena de reciclaje”, indicó Sarco.

El experto señala que el apoyo no es solo medioambiental, sino que favorece a que miles de recicladores informales encuentren la posibilidad de formalizarse, unidos en cooperativas que se dediquen a esta labor, beneficiando así a miles de familias en el Perú. La cadena de reciclaje, una vez iniciada, es un ganar y ganar para todos los participantes en ella.


Reciclatón, una campaña para iniciar el proceso

La campaña de Wong promueve, justamente, que la cultura del reciclaje se inicie en las familias peruanas en el lugar donde realizan muchas de sus compras para el hogar. Y es que iniciar el proceso de reciclaje desde el hogar es algo que se debe instaurar para que la cadena sea mucho más fácil de ejecutar y obtener todos sus beneficios.

El plástico Pet es utilizado por Wong para elaborar sus envases de plástico para distintos productos alimenticios, que son 50% de material reciclado, pese a que el mínimo por ley es mucho menor. La empresas, por decisión propia, se ha puesto esta meta.

Así pues, reciclar en las instalaciones del supermercado también tiene otros incentivos, como la obtención de puntos bonus, entre otros beneficios.

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